La infección por papilomavirus humano (HPV) representa una de las enfermedades de transmisión sexual más comunes. La familia del papilomavirus humano cuenta con más de 100 tipos virales clasificados en alto y bajo riesgo. El paradigma de los primeros lo constituyen los tipos HPV 16 y HPV 18 y el de los segundos los tipos HPV 6 y HPV 11. Los HPV de tipo 6 y 11 rara vez se encuentran en lesiones neoplásicas y cursan predominantemente con los condilomas acuminados y la papilomatosis laríngea. Los tipos de alto riesgo siguen con mayor frecuencia un curso silente y una fracción considerable de las infecciones es autolimitada.
Tanto la mujer como el hombre pueden ser portadores asintomáticos y vehículos de la infección por HPV. Las infecciones por HPV se encuentran diseminadas en todo el tracto genital inferior,(cuello uterino, vulva, vagina y canal anal).
Una de las razones por las que este tipo de infecciones ha cobrado un gran interés reside en la asociación etiológica de algunos tipos de HPV con el carcinoma de cuello uterino y otros tumores del tracto anogenital.
Las asociaciones observadas entre la infección por HPV y el cáncer cervical son las más fuertes de las identificadas en cancerología humana, y existe consentimiento creciente en calificarlas como causa necesaria (ausencia de enfermedad en ausencia de infección) e insuficiente ( presencia de infección sin presencia de enfermedad) debido al gran número de infecciones que se resuelven espontáneamente.
El diagnóstico de lesión requiere la confirmación anatomopatológica de la zona en estudio (cuello uterino, vulva y/o vagina) para poder luego instaurar el tratamiento adecuado: crioterapia, topicaciones, cremas, láser u otra alternativa terapéutica que será evaluada por el medico tratante.
Debido a esta asociación con determinados tipos virales se han desarrollado vacunas con antígenos de los subtipos 6-11-16-18.
Los tipos 16 y 18 son responsables de aproximadamente el 80 % de los cánceres del cuello uterino, por lo que las vacunas contienen siempre estos antígenos.
Existen en la actualidad dos alternativas de vacunación , la tetravalente (6-11-16-18) Gardasil y la bivalente (16-18) llamada Cervarix.
Ambas son seguras, teniendo un esquema similar de vacunación de 3 dosis, debiendo aplicarse la segunda al mes y la tercera a los 6 meses de la primer dosis ; siendo fundamental respetar y cumplir el esquema para que sea efectiva.