Osteoporosis

Se define como una enfermedad de los huesos, que involucra una pérdida de la densidad mineral ósea

 

Se define como una enfermedad sistémica de los huesos, que involucra una pérdida cuantitativa de la densidad mineral ósea (DMO), lo que facilita la aparición de fracturas ante traumatismos mínimos.

Hay cuatro factores determinantes: genética, nutrición, hormonas sexuales y actividad física.

Genética: es un factor que no se puede modificar, pero sí tener en cuenta para tomar medidas preventivas desde una edad precoz.

Nutrición: es fundamental tener una adecuada ingestión calórica, un aporte de proteínas animales y vegetales y una cantidad de minerales, fundamentalmente calcio, para que el esqueleto en desarrollo pueda calcificarse.

Hormonas sexuales: los estrógenos son esenciales para la calcificación ósea, su brusca disminución en la menopausia genera alto riesgo; en los hombres la disminución de la testosterona provoca el mismo efecto pero, a diferencia de  la mujer, el descenso es lento por lo que el riesgo de osteoporosis es menor y su aparición tardía.

Actividad física: es fundamental la misma para prevenir esta patología aunque en la menopausia el ejercicio no previene la pérdida  ósea por déficit estrogénico.

El diagnóstico se basa en la evaluación de la DMO mediante el estudio correspondiente, junto con análisis de sangre y orina.

El tratamiento depende, como siempre, de la etiología pero básicamente se basa en 3 pilares, a saber:

     1-dieta adecuada, se necesitan incorporar 1200 mg de calcio diarios y 800 U de vitamina D; evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco; lo mejor es tener una consulta con una nutricionista.

     2-actividad física, en ese sentido se ha demostrado que el caminar regularmente 12 km por semana puede disminuir la tasa de pérdida ósea

     3-medicamentos: estrogenoterapia, tibolona (Klimastress) son alternativas cuando se asocian con síntomas carenciales (tuforadas)

Bifosfonatos como el ibandronato (Idena) que inhibe la resorción ósea y, de esta forma, mantiene la fortaleza del hueso, su ingestión debe ser cada 28 dias, en ayunas, dejando pasar unos 30 minutos para ingerir alimentos. En general el tratamiento es bien tolerado y se mantiene el esquema entre 12 a 24 meses.